Un año más, Plenas cumplió con la tradición de la ‘enramada’. Así, la noche anterior al Domingo de Pascua los chicos ‘enramaron’ las casas de las chicas, bien por cuadrillas o por quintadas, con ramos de carrasca que previamente habían cortado y que luego adornaron con chucherías engalanando de esta forma los balcones y ventanas de las fachadas de la localidad.

Y, según manda la tradición, ya el Domingo de Pascua los chicos ‘enramadores’ pasaron por las casas de las chicas que habían enramado para la recoger la rosca, propina o regalo pertinente y, más tarde fueron todos juntos a merendar.

Se mantiene así viva una costumbre muy antigua y particular de esta la localidad que siguen realizando los chicos desde que nacen hasta su juventud y que propicia un muy buen ambiente en el municipio. T