La Ermita del Sepulcro ya luce en todo su esplendor. Recientemente se llevó a cabo la inauguración tras las obras de restauración del templo a la que asistió el alcalde, Eduardo Arilla y varios concejales, junto a la arquitecta responsable de los trabajos, María Martínez, y Alberto Aguilera, quien explicó la ermita y su sentido religioso.

La intervención consistió en un zunchado perimetral de los muros en su coronación, encamisado de las bóvedas, con una capa o camisa de yeso sobre su trasdós (parte convexa), incluida malla plástica; saneado y consolidación de los muros, incluido el revoco exterior de cal hidráulica; nuevo pavimento interior de la nave y exterior del pórtico con ladrillo macizo nuevo colocado en espiga, sobre capa de mortero de agarre y nueva solera de hormigón. También se han restaurado las jambas de la puerta y los pilares del pórtico.

El interior ha sido pintado y se han reproducido en vinilo los lienzos que decoraban los vanos en torno al altar, habiendo sido sustituido asimismo el cerramiento de cristal, colocando en su interior la copia del Cristo yacente, cuyo original se exhibe en el Museo de la Colegiata, lugar a donde también se ha llevado ahora la imagen de vestir de la Dolorosa. Finalmente se ha colocado la cruz de remate sobre el hastial. Lo único que queda pendiente para su total consolidación es el rescate parcial de la cimentación, ya que la original se encuentra algo deficiente.

La inversión ha ascendido a 88.000 euros de los que 28.000 proceden del plan de rehabilitación de bienes inmuebles de titularidad municipal y el resto han sido aportados por el consistorio, incluyendo la brigada de obras que ha realizado los trabajos. T