Los habitantes y simpatizantes de la villa de Encinacorba recordaremos este año 2008 por la participación del Dance en la Expo y por la presencia de su Virgen del Mar, acogida y venereda en la capillita del pabellón de la Santa Sede.

El Dance de Encinacorba en honor a Nuestra Señora del Mar es de creación moderna (1895), una obra espectacular del escolapio Dionisio Fierro Gasca (1853-1916).

Este tradicional dance posee tres partes principales: "La pastorada" en la que dialogan el Mayoral y el Zagal de temas relacionados con la fiesta religiosa y acerca de asuntos locales teñidos de elementos críticos o satíricos. Se incorporan los "dichos" que se dirigen a la patrona, a hechos o personajes del pueblo.

"Dialogo de cristianos y turcos". El nudo de la trama es la pérdida de la isla de Rodas por los cristianos en tiempos de la Cruzadas (año 1515) y la aparición de la virgen a siete comendadores sanjuanistas que regresaban y se vieron amenazados por una tempestad. La sortearon siete veces viéndose favorecida Encinacorba.

La tercera parte es "El diálogo entre el Ángel y el Diablo". El ángel será objeto de exaltación en la dirigirá alocuciones y vivas a la Virgen (originales del que fuese su director en los años 40, Anselmo Palacios Guia 1905-78). Constituye el final y cierre de esta manifestación cultural.

Parte de la trama de este acontecimiento se recoge en el canto de los "Gozos a la Virgen del Mar", letra y música a tres voces mixtas y órgano compuesta por Hilarión Eslava, interpretada por voces de este pueblo desde tiempos inmemoriales.

Las danzas se intercalan a modo de transición durante la representación teatral, son seis: "La bajadica", "Le decía la Virgen al niño" (ambas con castañuelas), "El paloteo", "Platos y espadas", "Vestir el palo" y "Rueda de las espadas" (o Exaltación del Ángel).

La música era interpretada con gaita y tamboril, hasta que se creo la Banda de Música a finales del siglo XIX.

Enrique Gómez Lázaro (actual director del dance) ilustró con versos en los años 80 la presentación de las danzas, también realizó correcciones y acotaciones del texto teatral.

Las representaciones completas, escasas a mi humilde juicio, quizás por la complejidad de su montaje, se han realizado en los siguientes años: 1930, 1945, 1978, 1979, 1982 y 1992.

Esporádicamente se han interpretado varias danzas, como ocurrió en su recuperación en 1977 --que además se confeccionaron los actuales trajes por parte de las madres de los danzantes--; en 1981 cuando unas intrépidas muchachas decidieron rendir este honor (privativo hasta entonces de los hombres) o como en los últimos años y en especial en el presente en que con ocasión de la Expo se ha representado "La bajadica", "El paloteo" y "Vestir el palo" en dos actuaciones, una en el pabellón de la DPZ y otra en el pabellón de Aragón con motivo de la celebración del día de la Comarca de Cariñena. En ambos casos acompañados de la Banda de Música y de gentes de todo el territorio comarcal.

Todos los que poseemos estas joyas históricas deberíamos mantenerlas vivas, tradiciones para unos, costumbres para otros o devoción para otros y conservar algo que nos pertenece y que conforma la historia del municipio al que pertenecemos y ello lo demuestra los sentimientos "primitivos y bellos" (como describe Enrique) que afloran al escuchar este dance.

Gracias a las personas que a lo largo de los tiempos han hecho posible todo esto. Y me despido como el ángel lo hace al finalizar esta maravillosa creación: "Y ahora, vecinos todos, gritad conmigo a porfía: ¡Viva la Virgen del Mar!, ¡Viva la Virgen María!

Mª JOSÉ GRACIA SANCHO