Reconocido a nivel mundial como el gran maestro de la papiroflexia, la trayectoria de Akira Yoshizawa avala con creces esta afirmación, puesto que hizo del arte del papel su misión y una forma de vida. Ahora, tras su muerte, el Centro de Historias de Zaragoza reúne hasta el 14 de mayo una pequeña parte de su basto legado artístico.

La muestra es el evento "que esperábamos para el gran lanzamiento del Museo del Origami", señaló el consejero de Cultura del Ayuntamiento de Zaragoza, Jerónimo Blasco, en la presentación de las 300 piezas de papel construidas por el artista japonés que la Escuela Museo Origami Zaragoza (EMOZ) ha conseguido traer hasta la capital aragonesa. "(Yoshizawa) Es un referente de la papiroflexia y una suerte que su arte pueda estar aquí expuesto", aseguró.

El pasado 14 de marzo, día en que se inauguró la exposición, es una fecha "muy importante" en la vida del artista nipón, puesto que ese mismo día nació, en 1911, y murió, en el 2005. Así lo manifestó Jorge Pardo, director del EMOZ, para después recordar que "en numerosos sitios estarían deseosos de tener esta exposición", y reconoció que ha sido "arduo el trabajo de contacto con la familia del artista para convencerles de que el Centro de Historias era el mejor lugar" para albergar esta valiosa muestra.

La comisaria de la exposición y cuñada del artista, Tamiko Kikugawa, puso el acento en el estilo que caracteriza la obra de este japonés, del cual destacó "la armonía". Si bien se han seleccionado tres centenares de piezas para la ocasión, a lo largo de su vida, Yoshizawa, confeccionó más de 50.000 figuras de papel inspirado en "todo lo que veía", afirmó Kikugawa, añadiendo que el objetivo que perseguía era "expresar el sentimiento de las personas a través de estas figuras".

TRES SALAS

Por su parte, Jorge Pardo hizo especial hincapié en la excepcionalidad de esta muestra, dado que una de las máximas del artista era que sus obras no permanecieran expuestas en los museos durante más de un mes. "Esta es la excepción" porque la familia ha autorizado que se prolongue el doble de tiempo.

Las dos primeras salas dedicadas a la obra de Akira Yoshizawa quedarán, además, de forma permanente en el Centro de Historias, según informó el director del EMOZ. Mientras, la tercera sala alberga máscaras, caballos, imágenes de Buda, así como a dos gorilas de diferente tamaño. Destaca el más grande de ellos que se realizó con un papel de un metro cuadrado, algo que resulta sorprendente teniendo en cuenta que la técnica del origami se caracteriza por doblar el papel sin cortarlo.

Perros, pingüinos, osos panda, cangrejos, los signos del horóscopo, tanto el japonés como el occidental, y otros animales son algunos ejemplos de las figuras que recoge esta exposición. También se proyecta un audiovisual grabado durante la estancia de Yoshizawa en Zaragoza, en 1997, donde muestra cómo se dobla el papel para obtener un cisne.