La Comisión de Salud de la Federación de Barrios (FABZ) aseguró no entender que se le haya concedido un premio, por parte de la editorial Sanitaria 2000, a Ricardo Oliván como el consejero más relevante del año o la mejor gestión sanitaria. "Pensamos que tal vez este premio haya ido en consonancia a los recortes aplicados en Sanidad en Aragón que tan solo han perjudicado a los usuarios y causado problemas a los pacientes", dijeron desde la federación.

Además, el colectivo recordó las "largas listas de espera que ha creado y que tanto sufrimiento causan a los pacientes", así como la "descapitalización de la sanidad pública en la Margen Izquierda de Zaragoza, restándole personal, servicios y medios técnicos, entre ellos el equipo de resonancia magnética y equipo de difusión pulmonar del hospital Royo Villanova".

Los barrios cuestionaron que "tal vez le hayan premiado por el asalto que hace unos nueve meses tuvo lugar en plena noche en el Centro de Salud Pablo Remacha de San José para llevarse los equipos de radiología, mamógrafos y ecógrafos para trasladar o centralizar el servicio en el hospital Miguel Servet, y que ha conseguido una demora de 10 meses para que a las vecinas se les pueda realizar una ecografía".

De igual modo, criticaron su "brillante proyecto" de centralizar la salud mental en Valdespartera, "despojando de este servicio a los centros de salud de los barrios, que es el lugar donde dicho servicio debería permanecer por una mejor atención, más humana y cercana al paciente". Asimismo, el colectivo advirtió de que "tal vez se le haya premiado por hacer oídos sordos a la cantidad de veces que los vecinos y vecinas han pedido su dimisión" porque "solo así entenderíamos la concesión de este galardón, como un premio a la ineficacia y recortes sin medida aplicados en la sanidad pública de Aragón", concluyeron.