El Jardín de la Memoria se transformó en un llamativo laboratorio de ideas diseñado para mostrar las líneas creativas que se plantean desarrollar en la Harinera de San José. Fue una jornada lúdica denominada Jardinacción, promovida por Llámalo H --colectivo interdisciplinar surgido del proceso de participación Harinera ZGZ--, Zaragoza Vivienda y la Asociación de Vecinos de San José. Una iniciativa que estuvo repleta de diferentes actividades abiertas a la participación ciudadana y relacionadas con el arte urbano, la ilustración, las artes escénicas, la autoconstrucción o el reciclaje creativo, entre otras disciplinas.

Murales llenos de vida vecinal, columnas pintadas, mobiliario restaurado, macetas que dan una nueva imagen al Jardín y deseos, muchos deseos, colgados. La idea era transformar colectivamente el espacio público a través de la creatividad y la participación. Porque la Harinera va más allá de ser un equipamiento cultural al uso, sino que pretende modificar también el espacio que le rodea a través de acciones conjuntas.

Después de varios meses de trabajo colectivo en torno a la reapertura de la Harinera de San José como espacio creativo, cuyas obras de reforma y acondicionamiento parcial se están realizando, los ciudadanos pudieron conocer con esta jornada celebrada el pasado 18 de abril los primeros resultados de este proceso de participación destinado a configurar y diseñar el proyecto de gestión y usos del espacio creativo de la Harinera.

Así, se realizaron distintos talleres de arte urbano, construcción de madera y reciclaje creativo que sirvieron, además, para que el Jardín de la Memoria renovase su imagen y muchos aprendan a disfrutarlo y aprovechen su potencial. Los más pequeños tuvieron la oportunidad de contribuir a esa transformación colgando sus deseos en el puente del Jardín y diseñando superhéroes para el barrio o interviniendo artísticamente algunos espacios.

"La jornada tenía un doble objetivo: la transformación de este espacio urbano y el fomento de la participación activa del barrio", comentó Diego Garulo, responsable del proyecto de la Harinera por parte de Zaragoza Vivienda. "Se pensó en el Jardín de la Memoria porque este es el primer territorio urbano junto a la Harinera, además de ser un espacio simbólico en el barrio, creado a partir de una reivindicación vecinal".

También hubo tiempo para la música y el baile, con la celebración de uno de los ya populares encuentros "clandestinos" de swing y la actuación de Escarabajo Tequila. Ni la aparición de la lluvia a última hora evitó la puesta en escena (modificada) de la performance Riega la H.

Fue toda una intervención ciudadana en el Jardín de la Memoria que llamaba la atención sobre su dignificación y mejora a través de estrategias de autoconstrucción y reciclaje creativo. Un espacio ciudadano que, junto a la Harinera, son dos de los símbolos del barrio, como siempre han defendido y por los que siempre han luchado los vecinos de San José.