El Ayuntamiento de Zaragoza no ha evitado que las fechas electorales afecten al desarrollo de las obras, de manera que el esquema planteado por los técnicos ni siquiera contempla un ritmo de ejecución desigual entre los ocho meses que durará la intervención en todos los distritos y barrios rurales. Mientras, la adjudicación ha conseguido abaratar los costes en el concurso público, de modo que el contrato garantiza un gasto de 2,5 millones de euros, a la UTE constituida por Mariano López Navarro y Urbanizaciones y Medio Ambiente, un 40% menos que los 4,17 por los que salió a licitación.

Por otra parte, la planificación de obras propuesta por los técnicos de Infraestructuras para la operación asfalto ha tenido en cuenta otra de las actuaciones de envergadura este año: la sustitución de las tuberías de gran diámetro que conecta el paseo Maria Agustín con la margen izquierda del Ebro a la altura de Valle de Ebro. La intervención está prevista para mediados de abril, en la tercera tanda de distritos, por lo que no interferirá en estos trabajos.