¿Qué sabemos de las emociones? ¿Tienen color, olor o sabor? ¿Qué temperatura tiene la rabia? ¿Qué origina la tristeza? ¿Cómo nos comportamos cuando llega el miedo? Estas fueron algunas de las cuestiones a las que se enfrentaron tanto los escolares del CEIP Calixto Ariño como los mayores del Centro de Día y Hogar IASS San José en una actividad intergeneracional organizada dentro del programa educativo Aprendemos con nuestros abuelos del colegio.

"Las emociones son los motores y brújulas que orientan, conducen y dan dirección a nuestras vidas". Bajo esta premisa, Marta y Lluvia Bustos llevaron a la práctica el desarrollo de la inteligencia emocional en dos segmentos muy concretos de población: niños de 6° de Primaria y personas mayores. A través de dos talleres celebrados los días 4 y 11 de marzo, los participantes trabajaron cinco emociones: la rabia, el miedo, la tristeza, la alegría y la sorpresa.

CINCO EMOCIONES

Para exteriorizar estos estados de ánimo, la primera sesión realizada en el colegio giró en torno a la narración de un cuentacuentos y varios juegos prácticos: hubo bailes con lazos de colores para expresar la alegría y lanzamiento de aviones de papel para alejar la rabia y el enfado. Una semana más tarde, la actividad se trasladó al centro de día y, durante dos horas, niños y mayores intercambiaron experiencias vitales en torno a la tristeza, el miedo y la sorpresa. Además, los participantes tuvieron que cumplimentar un test, antes y después de cada sesión, con el objeto de plasmar lo que habían aprendido y habían sido capaces de entender.

Esta experiencia sobre la inteligencia emocional desarrollada con escolares y mayores en el distrito de San José tenía como punto de partida el libro Alicia y la libreta de las emociones. Escrito por Marta, Lluvia e Irene Bustos en cuatro idiomas --español, inglés, italiano y francés--, esta publicación cuenta la historia de una niña que por no comunicarse con sus padres, familiares y amigos se fue hinchando hasta salir volando como un globo. No es un libro cualquiera, sino un cuento fabricado tanto para niños como para adultos.

Alicia y la libreta de las emociones es una aventura que divierte a grandes y pequeños y les acerca hasta el mundo de la inteligencia emocional. Es un libro-taller para ayudar a los niños a expresar de forma sencilla y lúdica sus sentimientos. Emociones que, a veces, cuesta explicar pero que todos sentimos. Junto al libro, Irene, Lluvia y Marta han creado un proyecto pedagógico dividido en tres grupos de edad, que enseñan por el territorio nacional y pronto llegará a Francia e Italia.