Fue, en efecto, la imagen del fin de semana. Fue, sí, uno de los videos más vistos en las redes sociales. Y fue, sin duda, un video que deja en muy mal lugar al icono del motociclismo mundial, el veterano piloto italiano, Valentino Rossi, nueve veces campeón del mundo e ídolo de masas. Fue, también, un video que recordó, y mucho, la famosa patada que el ‘Doctor’ le propinó a Marc Márquez en el Gran Premio de Malasia del pasado año, aquel del ‘biscotto’, el que hizo que ‘Vale’ convirtiese al ‘nen de Cervera’ y al tricampeón mallorquín Jorge Lorenzo en sus enemigos para el resto de los días.

La imagen difundida por las redes sociales en la que Rossi,conduciendo él mismo su scooter por el paddock de Cheste (Valencia), llevando detrás a su jefe de prensa, ha dado la vuelta al mundo pues, para abrirse camino entre el público, entre los aficionados, el as italiano acaba propinándole una patada a una señora que, al parecer, estaba de espaldas tratando, dicen, de hacerse un selfie con Rossi.

“Solo puedo pedir disculpas y las pido, sí, pero también quiero decir que empieza a ser imposible, al menos para mi, vivir en el ‘paddock’ del Mundial y, muy especialmente, en algunos sitios como aquí, en Cheste. Hay muchísima gente y todos me persiguen a mí, se agolpan a mi alrededor y quieren hacerse fotos conmigo. Lo entiendo, pero también ellos han de entender que, a veces, ocurran estos incidentes. Insisto, pido disculpas a la señora a la que golpeé”, comentó tras acabar cuarto el Gran Premio de Valencia detrás de Jorge Lorenzo, Marc Márquez y Andrea Iannone.

“Cada vez que salgo de mi motorhome, de mi box, voy a algún acto o a las reuniones que mantenemos los pilotos con los responsables de seguridad, me esperan un montón de personas, quieren quitarme la gorra, hacerse fotos conmigo y pedirme autógrafos. Insisto, es imposible vivir así”.