Desde que BMW lanzó en 1977 la primera generación, el Serie 7 se ha distinguido por sorprender a todos con innovaciones tecnológicas que le han situado en el vértice de las grandes berlinas premium. Ahora, con la aparición de la sexta generación, la marca bávara refrenda este despliegue tecnológico con nuevos sistemas que le permiten dar un paso más y todo ello acompañado de otras innovaciones que permiten que sus directivos reconozcan que es el mejor Serie 7 que han construido hasta ahora.

Entre las nuevas aplicaciones hay dos que sobresalen. Una es el asistente remoto de aparcamiento que se acciona a través de la llave, que es de serie, permitiendo que el conductor pueda aparcar desde fuera del vehículo de forma autónoma y en espacios reducidos. La llave es de mayor tamaño que la habitual y es como una pantalla táctil de smartphone a través de la cual se puede comprobar, aunque se esté lejos del coche, el estado de luces, puertas y ventanillas y la autonomía disponible, entre otras cosas.

Esta sexta generación se ofrece con dos longitudes de carrocería. La corta mide 5,10 metros y la larga, 5,24 metros. Estéticamente, muestra una imagen más estilizada. En el frontal destaca la clásica calandra de doble riñón, aunque de mayores dimensiones de lo que es habitual, lo que le permite quedar "encajonada" entre los nuevos grupos ópticos, en tanto que las luces de led se sitúan en los bajos del paragolpes. Un marco cromado rodea todas las ventanillas y en la zaga los pilotos quedan unidos por una barra cromada transversal. Llantas de diseño específico y doble tubo de escape.

El coche ha rebajado su peso en 130 kilos gracias al empleo de aluminio, fibra de carbono y aceros de alta resistencia que, además de reforzar la estructura, permiten que consumos y emisiones hayan disminuido un 20%. El maletero tiene una capacidad de 515 litros y el interior ha sido renovado totalmente con un salpicadero de nuevo diseño y pantalla central táctil multimedia.

Esta sexta generación está disponible con dos motores. Un V8 de gasolina de 4,4 litros y 450 CV con tracción a las cuatro ruedas y un V6 diésel de 3 litros que ofrece 265 CV y un consumo muy bajo, que puede ir con tracción trasera o total. Ambas versiones van asociadas a una caja automática de ocho marchas. Más adelante habrá también una versión híbrida.

Ya son compatibles el sistema de dirección activa en las cuatro ruedas y la tracción total. También cuenta con el Driving Experience Control que añade el modo Active por el que mediante el sistema de navegación, una cámara frontal que "visualiza" la carretera y el tráfico, adapta chasis y motor a nuestra conducción. Si a ello le unimos los últimos sistemas de ayuda a la conducción y seguridad, el modelo es un compendio tecnológico, revestido con el lujo y calidad premium de BMW. El nuevo Serie 7 está a la venta desde 94.650 euros.