Todo comenzó a mediados de los años 40, cuando Maurice Wilks, un ingeniero mecánico y aeronáutico, esbozó un dibujo sobre la arena para dar forma a una idea que le rondaba la cabeza: un vehículo robusto y duradero capaz de afrontar todo tipo de complicaciones en diversos terrenos. Aquellos trazos fueron la base del Land Rover Serie I, denominado HUE 166 y popularmente conocido como Huey. Estaba propulsado por un motor de gasolina 1.6 de 50 CV. Fue presentado en 1948 en el Salón de Ámsterdam. Se convirtió en la herramienta de trabajo de diferentes profesiones, desde las relacionadas con el campo hasta los servicios de emergencia o las compañías militares.

Aquel mismo 1948, hace ya más de seis décadas y media, llegó la versión alargada (Station Wagon), con una carrocería con el marco de madera y siete plazas. Estaba producida por Tickford, que trabajaba para marcas como Rolls-Royce y Lagonda. Se distinguía de la variante estándar por su mayor equipamiento y su precio más elevado. En 1950, la marca británica introdujo la primera variante con tracción total (4WD) conectable y modificó ligeramente el diseño al ubicar los faros por fuera de la rejilla del frontal, y no por dentro como hasta entonces. A principios de los 50 llegó un motor de gasolina de mayor cilindrada (2.0 litros).

Motor diésel

Una de las principales novedades se produjo en 1957, cuando comenzó a estar disponible un propulsor diésel, un 2.0 de 52 CV. Previamente, Land Rover había modificado ligeramente el chasis ampliando la distancia entre ejes y ampliado la capacidad de la versión Station Wagon, que pasaba a ser capaz de llevar a 10 personas.

En 1958 llegó el Land Rover Serie II, un año antes de que se alcanzaran las 250.000 unidades vendidas. Se podía elegir entre dos chasis, que se diferenciaban por la batalla: BS (2.200 milímetros) y LWB (2.800 mm). De esta versión llegó a haber un modelo de 12 plazas. Además del diseño, la novedad fue el motor 2.2 de 73 CV. Durante un tiempo se mantuvo el anterior 2.0 de gasolina. El diésel de 52 CV del Serie I llegó al Serie II y se mantuvo durante toda su vida comercial.

En 1961 se presentó el Serie II A, cuya novedad más importante fue el motor diésel de 2,2 litros. Estéticamente era muy parecido al Serie II. En 1966, la marca británica celebró el medio millón de unidades producidas. Un año después lanzó una versión con motor de gasolina de 2,6 litros y 2.769 milímetros de distancia entre ejes. En 1968, Rover, la marca que comercializaba el Land Rover, pasó a formar parte de British Leyland Motor Company.

El Land Rover Serie III aterrizó en el mercado en 1971. Con pocos cambios estéticos, se comercializó hasta 1985. Durante esos 15 años hubo tres motores de gasolina y uno diésel. Los primeros eran un 2,2 de 73 CV, un 2.6 de 87 CV y un 3.5 de 92 CV, mientras que el otro era un 2.2 de 63 CV. Previamente, en 1970, llegó el segundo modelo de Land Rover, el Range Rover, más lujoso y más enfocado a un uso por carretera, pero sin perder su capacidad todoterreno. Fue el inicio de la expansión y refinamiento de la gama de la firma inglesa, que se consolidó en 1983 con la presentación del sustituto del mítico Land Rover, el Defender.

Tras unos años convulsos, Land Rover fue adquirida por BMW en 1994. Hasta el año 2000, cuando la vendió a Ford, la etapa de Land Rover como parte de BMW destacó por la diversificación de producto con la llegada del Freelander, en 1996, un modelo de menor tamaño y plenamente válido para carretera. Previamente había sido introducida la segunda generación del Range Rover, que convivió unos años con el original (pasó a denominarse Range Rover Classic). La segunda generación del Discovery llegó en 1998.

Range Rover Sport

Entre el 2000 y el 2008, con Ford al mando de Land Rover, se presentó un nuevo modelo, el Range Rover Sport (2005), un SUV de lujo para competir con el BMW X5 o el Mercedes-Benz Clase M, así como la tercera generación del Range Rover (2001) y del Discovery, que pasó a llamarse Discovery 3 (2004). Más adelante llegaron la segunda generación del Freelander, conocido como Freelander 2 (2006), y un Defender completamente renovado (2007). Ford decidió poner en venta Land Rover y cerró las negociaciones con Tata Motors. El grupo indio se hizo con Jaguar y Land Rover en el 2008 y comenzó una etapa en la que está llevando a cabo una gran ofensiva de producto.

Así, desde entonces ha presentado novedades prácticamente cada año, En el 2009 fue el turno del Discovery 4, un año más tarde el del restyling del Range Rover, en el 2011 lanzó un nuevo modelo, el Range Rover Evoque, un pequeño SUV de lujo, y una actualización del Freelander, dejando para el 2012 la cuarta generación del Range Rover. También está a la venta la segunda entrega del Range Rover, que se presentó a mediados del 2013. Los modelos de Land Rover se venden en 180 mercados de todo el mundo, con una gama formada por seis modelos: Defender, Freelander 2, Discovery 4, Range Rover Sport, Range Rover y Range Rover Evoque. Todos mantienen algo de la esencia de aquel primer Land Rover que dio sus primeros pasos hace más de 65 años.