Al atletismo español no le sientan bien los viajes a Asia. Desde los Juegos de Seúl-88, en los que los atletas no se colgaron ni una medalla, no se repetía una situación parecida. Veinte años después, el equipo vuelve de Pekín sin metales. José María Odriozola, el presidente de la federación española, defendió ayer la actuación de los 54 seleccionados. "Yo no hablaría de fracaso sino de mala actuación en algunos casos y también de mala suerte en otros, como la caída de Marta Domínguez, el mal día de Paquillo Fernández, el manotazo que recibió Josephine Onyia en la salida o el centímetro que le faltó a Mario Pestano para pasar a la mejora. Pero, en conjunto, más de la mitad han competido bien o muy bien y hemos tenido un finalista más (11) que en Atenas (10)".

"Se nace Fermín Cacho o se nace Marta Domínguez, a estos no les hace falta psicólogo". Odriozola citó a dos atletas ejemplares para justificar, por contraposición, la falta de competitividad de algunos. Esta vez fue prudente y no dio nombres. "Yo ni corro ni salto ni lanzo. Lo que hace la federación es gestionar lo mejor posible los recursos de los que dispone, en un país con una futbolitis galopante. Pero no vamos a tirar la toalla". Hasta una decena de veces repitió esa frase.

Odriozola pronosticó una actuación en Pekín que iba a mejorar la de Barcelona-92, donde hubo cuatro medallistas, dos de oro, y casi por primera vez se equivocó. La mejor actuación ha sido la del atleta más veterano (38 años), el marchador Jesús Ángel García Bragado. El resto de finalistas fueron Juan Carlos Higuero (30 años), quinto en 1.500; Frank Casañas (29), quinto en disco, y María Vasco (32), quinta en 20 kilómetros. Natalia Rodríguez (29), sexta en 1500 y el mismo puesto para Beatriz Pascual (26) en marcha. Séptimos fueron Ruth Beitia (29) en altura, Luis Felipe Méliz (29) en longitud y Paquillo Fernández (31) en 20 kilómetros. Y Jackson Quiñónez (28) e Iris Fuentes-Pila (27) fueron octavos en 110 vallas y 1.500, respectivamente.

La aportación de atletas finalistas de origen extranjero es de un 27%, y la edad media es de casi 30 años (29,7), un dato preocupante cara a los Europeos de Barcelona del 2010. Odriozola también defendió la veteranía: "Yo no voy a jubilar a nadie porque tenga más de 30 años. Pero nos falta materia prima. Tenemos un atletismo artesanal y la educación física sigue siendo una asignatura pendiente. Hay un dato muy preocupante: España es el tercer país con más obesidad infantil en el mundo tras EEUU y Gran Bretaña. Y el fútbol solo nos deja las migajas de los patrocinadores. Pero no vamos a tirar la toalla".