Convertir a Zaragoza en la capital del debate europeo sobre el coche del futuro y que el Pabellón Puente sea un parque tecnológico del automóvil es el ambicioso proyecto que se presenta el lunes auspiciado por Ibercaja y el Gobierno de Aragón. Nace para rentabilizar una infraestructura no utilizada desde el 2008 y se han embarcado los grandres fabricantes de vehículos, los de componentes y los cluster de automoción y TIC para afrontar el reto de la movilidad del futuro. La garantía la da el músculo financiero de Ibercaja y que es otra apuesta por el tejido empresarial aragonés.