Tienen razón los responsables municipales de Zuera y Villanueva de Gállego al recelar de los continuos incendios que se producen en el campo de maniobras de San Gregorio y que ponen en riesgo sus pueblos. Reclaman más medidas preventivas en un entorno que el pasado domingo volvió a cobrarse la quema de 120 hectáreas. Ahora, además, el Ejército pone en duda que el fuego se iniciara en su recinto. De cualquier forma, lo dilucidará la investigación del Seprona. Pero al margen del resultado, la petición de los alcaldes debe atenderse.