La admisión a trámite en la Audiencia Nacional de un recurso contencioso presentado por Ecologistas en Acción contra el embalse de Almudévar ha causado honda preocupación entre regantes y administración. Tras el varapalo que supuso para Riegos del Altoaragón la reciente paralización del proyecto de Biscarrués, sobre el cauce del Gállego, cualquier incertidumbre sobre esta presa que se ubicaría en zona regable genera aún mayor zozobra. Una vez más se pone de relieve que es necesario buscar puntos de unión entre diferentes sensibilidades, pues sin esos consensos básicos no se conseguirán avances nítidos en las obras de regulación que precisan amplias zonas de la comunidad.
