En el juicio que se celebra en la Audiencia Provincial de Zaragoza contra un exmédico de Zuera acusado de vender drogas, alcohol y móviles a un preso, el abogado defensor insistió en la versión de que los ingresos recibidos eran por un trabajo técnico para una granja. Pero el informe estaba escrito en catalán y otro abogado pidió que se tradujera. El juez, tras comprobarlo, sugirió que se entendía perfectamente y, además, dijo, es lengua cooficial.