La Fiscalía ha intentado tumbar fuera de plazo el auto de exhumación de los restos de los dos anarquistas bilbilitanos del Valle de los Caídos. Una maniobra, rechazada por la jueza, que es un insulto a las familias de los hermanos fusilados en Calatayud. La Ley de Memoria Histórica solo busca que resplandezca la verdad y se reparen los daños del franquismo y ese debería ser el objetivo a perseguir por una institución tan importante. La Fiscalía General del Estado, si no estaba informada, debería dar un toque de atención al autor de ese desliz.
