Dos meses después de la final de la Copa del Rey entre el Barça y el Athletic, y de la polémica político-deportiva suscitada por la atronadora pitada al himno de España, la Comisión Estatal contra la Violencia, el Racismo, la Xenofobia y la Intolerancia en el Deporte ha propuesto unas sanciones desiguales para los dos clubs finalistas, la Federación Española de Fútbol (organizadora del partido) y las entidades que impulsaron la protesta. Contra estas últimas han recaído las sanciones más elevadas al ser consideradas instigadoras de la pitada. Los dos clubs se han mostrado extrañados por las peticiones de castigo que han recibido. Ellos dicen que intentaron sofocar el incendio que se anunciaba y sus altos representantes reclamaron a sus aficiones que se comportaran con el máximo respeto a los símbolos nacionales. Es solo una propuesta de sanción. Será Interior quien decidas y a quien, por lo tanto, le corresponde actuar con espíritu garantista de todos los derechos en disputa.