Urge hacer algo para evitar que se vuelvan a producir accidentes como el ocurrido el sábado por la noche en el que un tranvía arrolló y mató a un joven. Desde el ayuntamiento de la ciudad y desde la propia empresa Tranvías de Zaragoza se debe realizar una amplia campaña de concienciación de los peatones para que extremen las medidas de seguridad y precaución ante la proximidad del tranvía. El año pasado fueron dos las víctimas mortales y el sábado ya murió el primero del 2018. Los despistes, las imprudencias o los intentos intencionados son difíciles de prever, pero es necesario hacer algo para frenar la accidentalidad que sufre el servicio. Los técnicos en seguridad deben de poner medidas en la mesa.