Poco ha publiqué en este periódico el artículo Ausencia de conciencia fiscal. Me sorprendió y preocupó la escasa respuesta en mis lectores. La idea era muy clara. Los políticos de la UE que nos han exigido ya tantos sacrificios, y que nos reclamaban otros 5.500 millones de euros de recortes, son los mismos que diseñaron los paraísos fiscales para camuflar sus inmensos beneficios las grandes empresas. Calificaba a tales dirigentes, encabezados por Jean-Paul Juncker de desalmados. Señalaba que deberíamos ser conscientes de que lo defraudado a los Estados lo tenemos que poner los trabajadores, pensionistas, autónomos y pymes para financiar el Estado de bienestar, o resignarnos a su degradación.

Quizá alguno me critique el calificativo de desalmados. No solo me reafirmo en su uso. Me quedé corto. Samuel Johnson, en el artículo La visión que el buitre tiene del hombre, nos dice que la naturaleza nos infundió una extraña ferocidad, que nunca ha visto en ningún otro ser que se alimente sobre la tierra. ¿No es feroz que la Comisión Europea nos obligue a recortar para contener nuestro déficit en el 2017 no 5.500 millones, sino 7.700? Mientras tanto la UE no combate de verdad la evasión fiscal. El derecho a veto en el terreno de la fiscalidad ha llevado a la UE a rebajar el proyecto de crear una lista negra europea de paraísos fiscales. La aplicación de un tipo cero en el impuesto de sociedades será un indicador, pero no un criterio, para definir un paraíso fiscal, como han acordado los ministros europeos de Economía. La clasificación orientativa, recientemente publicada, incluía 81 países, pero también territorios dependientes del Reino Unido, como la isla de Man o Jersey. El gobierno británico se ha movido para evitar que los criterios de la futura lista europea le castigaran por el criterio de la imposición de tipos cero o la facilitación de estructuras offshore, como defendían España, Alemania y Francia. Sin embargo, Holanda, Irlanda y Luxemburgo, entre otros, han apoyado la postura británica. La responsable de Justicia Fiscal de Oxfam Intermón, Susana Ruiz ha respondido a los ministros de Economía de la UE, denunciando que: «Han optado por criterios subjetivos y políticamente discutibles para establecer la lista negra de paraísos fiscales». Según el eurodiputado verde alemán Fabio De Masi: «Es grotesco que algunos Estados miembros consideren el criterio de tipo cero muy estricto, por lo que hasta las Bahamas van a quedar fuera de la lista». Mas, los problemas están dentro de la misma casa: las multinacionales implicadas en el escándalo de los papeles de Panamá contaron con la complicidad de entidades financieras de la UE. Un informe reciente de los Verdes presentado en el Parlamento europeo ha denunciado que la química alemana Basf se ahorró 923 millones de euros entre 2010-2014 gracias a procedimientos fiscales diseñados en Holanda, Bélgica, Malta y Suiza.

No obstante, la injusticia fiscal irrumpe por doquier. Fijémonos en las sicav. Mecanismos al servicio de las grandes fortunas para invertir parte de su dinero y pagar un 1% de impuestos por rendimientos. Cito algunas de ellas. La del patrimonio de Torrenova -vinculada a la familia March- con 1.320 millones en setiembre actual. Morinvest, depositaria de activos de Alicia Koplowitz con 536,4. Soandres, de Sandra Ortega, hija de Armando Ortega con 416,3. Elitia, de la familia Gallardo Ballart, propietarios de la farmacéutica Almirall con 390,6.

Mientras que los ciudadanos de a pie pagamos nuestros impuestos, además somos masacrados. El recibo de la luz de una familia tipo, unos 12 millones de usuarios, adscritos a lo que se conocía como tarifa regulada y que hoy, fruto de la creación del exministro de Industria, José Manuel Soria, se llama precio voluntario del pequeño consumidor (PVPC), se ha encarecido cinco euros en un solo mes, pese a no haber consumido más. El de octubre ascendió a 60 euros frente a los 55 del mes anterior, el 8% más. En abril, era de 49 euros, el 20% menos. Empero, todo es susceptible de empeorar, ya que habrá nuevas subidas en el invierno dado el predominio del carbón y el gas en la generación eléctrica, más costosas que las renovables. En contraste, las tres mayores Eléctricas (Iberdrola, Endesa y Gas Natural Fenosa) con operaciones en España obtuvieron un beneficio neto conjunto de 4.276,7 millones de euros en los nueve primeros meses del año actual. Entre julio y septiembre en España se realizaron más de 5,3 millones de horas extraordinarias semanales, y solo se retribuyeron el 51,06%. ¿No es el paro el problema más grave?

De verdad, los españoles tenemos más paciencia que el santo Job. Por ello, no han perdido actualidad las palabras de Manuel Azaña de 1911, en el discurso El problema español, en la Casa del Pueblo de Alcalá de Henares, apelando al pueblo español para que reaccionase y saliera del sopor: «¿Vamos a consentir siempre que la púrpura cuelgue de hombros infames y que la inmensa manada de los vividores, de los advenedizos manchados de cieno usurpe la representación de un pueblo y lo destroce para saciar su codicia?».

*Profesor de instituto