Si los bombardeos de precisión que lleva a cabo Israel en Gaza (contra viviendas, hospitales y escuelas convertidas en último refugio ) no son crímenes de guerra, ya me dirán ustedes qué cosa pueden ser. Personas relacionadas con la causa sionista e incluso analistas que se pretenden neutrales lamentan que se dé voz a los palestinos que lloran a sus hijos asesinados, a los desbordados médicos que muestran dantescas escenas de civiles heridos o a los representantes de las organizaciones de asistencia a los refugiados que claman contra la matanza. Argumentan que es preciso racionalizar la descripción del conflicto pues, si no, se desencadena una visión emocional del mismo, que favorece a Hamas. Pero lo que más saca de quicio a estas buenas personas es cualquier comparación entre lo que está ocurriendo... y el Holocausto. Ven en ello un insulto a las víctimas de aquel crimen, una muestra de antisemitismo.

Pero las evidencias de que los descendientes del pueblo que sufrió la shoah usan hoy en día métodos equiparables a los de los nazis están ahí. Conozcan ustedes la breve y horrible historia del gueto judío de Varsovia (1940-1943), y encontrarán perturbadoras similitudes entre lo acaecido en aquel infame lugar y la situación actual en Gaza: aislamiento impuesto, subalimentación, pésimas condiciones de vida en general, violencia militar planificada contra una población inerme... y una resistencia casi demente por parte de quienes se ven reducidos a la condición de subhumanos. Allí fueron los hebreos, aquí los palestinos. La misma gente que no tiene dónde esconderse, la misma gente que se refugia en los túneles y lucha desde ellos, la misma gente golpeada por una maquinaria bélica omnipotente.

Sí: Netanyahu es un extremista, el estado de Israel vulnera las resoluciones de la ONU y su "derecho a defenderse" se expresa de forma desproporcionada y brutal (como reconoce, cuando es sincero John Kerry). Todo lo cual mancilla el recuerdo que merecen las víctimas del Holocausto. Y no me vengan con acusaciones de antisemitismo. De eso, nada. Además... ¿no son también semitas los palestinos?