El conflicto generado tras la autorización de la DGA a la universidad privada San Jorge para la implantación del grado de Magisterio, con dos ofertas públicas ya existentes en Teruel y Huesca, está lejos de diluirse. La consejera de Educación, Dolores Serrat, deberá comparecer en la Diputación Permanente de las Cortes para explicarlo mientras la Universidad de Zaragoza incide en sus argumentos para oponerse a la medida. A los ya conocidos suma el de la saturación laboral que provocará, ya que Aragón ha perdido 764 plazas de maestro desde el 2007. Y no hay apenas oposiciones.
