La atracción del Pirineo en verano se incrementa día a día, por su oferta relacionada con la naturaleza, una climatología que permite huir de los calores agobiantes y por sus recorridos montañeros. Una combinación que en este mes de agosto ha costado la vida a una decena de personas como consecuencia de accidentes sufridos en travesías, escaladas o bajada de barrancos. La Guardia Civil se ha tenido que movilizar, asismismo, para ayudar a múltiples accidentados. La montaña se puede disfrutar pese a los riesgos que entraña, pero conviene acercarse a ella con respeto y preparación.