Los grupos parlamentarios y los diputados de las Cortes aragonesas se enfrentan ya a una de las primeras decisiones que puede evidenciar los enfrentamientos políticos atemperados durante el verano. El anuncio del presidente Lambán de derogar la ley de lenguas que impulsó Rudi ha abierto las hostilidades. Podemos, CHA e IU apoyan la iniciativa como es lógico con las nuevas mayorías; PP y PAR insisten en los argumentos que les llevaron a defender la anterior y Ciudadanos se lo está pensando. Lapao y Lapapyd tienen los días contados.