Las instituciones han llegado a una situación económica tan penosa, que no quieren edificios mejores ni regalados. Es el caso de la Universidad de Zaragoza, cuyo rector, Manuel López, ha rechazado la cesión del pabellón de España de la Expo porque no tiene dinero para mantenerlo. Lógico porque, además, la DGA no colabora nada en la financiación universitaria por mucho que diga. Justo lo mismo que le pasa al Ministerio de Hacienda que no sabe qué hacer con el recinto. Con lo que se queda otra vez sin proyecto tras seis años de planes frustrados. Una pena. Aún habrá que subastarlo...