El Ayuntamiento de Zaragoza ya ha culminado el proceso de los llamados presupuestos participativos, que con una cuantía de unos cinco millones de euros permitían a la ciudadanía elegir los proyectos que consideraban adecuados para sus barrios. Un total de 113 iniciativas han sido aprobadas, pero con la participación de apenas el 1% del censo de los mayores de 14 años que podían opinar. La oposición considera que el proceso tenía fallos, pero el principal es el poco entusiasmo que se demuestra entre los ciudadanos por decidir asuntos de su interés cuando hay posibilidad de hacerlo de forma directa. Y no será por falta de promoción de la iniciativa. Involucrarse eleva el nivel de la democracia.