Tras el último informe que evidenciaba que el retraso del Gobierno de Aragón en el pago a proveedores, el Fondo de Facilidad Financiera permitirá que en los próximos días sean abonados 171 millones a los acreedores de la comunidad. La demora a mes de febrero, que superaba de media los 112 días, era absolutamente improcedente. Habrá que ver si con la nueva inyección será suficiente para poner en orden las cuentas y, sobre todo, para evitar el relevo de la DGA en verano con el cajón lleno de facturas, como ocurrió hace cuatro años.