El desarrollo urbanístico más importante de Zaragoza, Arcosur, está entrando en una espiral de tensiones que puede suponer graves afecciones para, al menos, 5.000 personas que están pendientes de recibir sus pisos en junio del próximo año. Para entonces deberían estar resueltas las obras de urbanización. La polémica surge con el relevo en la presidencia de la Junta de Compensación. El nuevo responsable, Manuel Asín, ya anunció en su momento que era partidario de ralentizar el ritmo de ejecución de los trabajos hasta diciembre de 2013... A no ser que el ayuntamiento aumentara la densidad de edificación, lo que suponía levantar 7.000 pisos más, lo que permitiría financiar y agilizar la obra. El consistorio no puede conceder ese aumento porque debería incrementar los equipamientos educativos y deportivos y no hay espacio para ello. Todo un pulso.
