El despertarse es el mismo, pero el mundo en el que te despiertas no es igual. Aquí la sanidad es universal, para todas las personas que están aquí. La democracia es participativa, la ciudadanía puede implicarse en los asuntos del Estado, porque el Estado es de toda la ciudadanía. La transparencia es un mecanismo para auditar las decisiones del gobierno. El gobierno de aquí trabaja para mejorar la situación de las personas de aquí. Esa es su misión. Y el aquí es flexible porque no están antes las fronteras que las personas. La justicia es gratuita. La banca está dirigida por la política, no la política por la banca. Y la política somos la ciudadanía. Por eso los bancos funcionan como cooperativas con vocación de servicio público. La usura está penalizada por ley. Tenemos un sistema de protección social que garantiza que nadie se quede fuera del sistema. Los niños pequeños tienen guarderías públicas, las personas mayores plazas de residencia y todos los que lo necesitan tienen ayudas a la dependencia. No existe el IVA que es un impuesto injusto que grava por igual a quien tiene poco y a quien tiene mucho. La justicia social, la solidaridad y la redistribución equitativa de la riqueza son pilares del Estado. Por eso se limitan los beneficios de las grandes empresas. Los impuestos son proporcionales al nivel de rentas. Las personas que trabajan como autónomos no pagan al Estado una cuantía fija sino que va en función de su volumen de ingresos. Tenemos una renta básica para la ciudadanía. Estos ingresos permiten vivir en condiciones de dignidad a aquellas personas que quieran cambiar la productividad laboral por la productividad social. Así hay personas que se dedican al cuidado de sus familias, a la creación artística o al activismo. No se permite la especulación con la vivienda porque es un bien de primera necesidad. La educación es pública, de todas las personas. La financiación solidaria permite que los ingresos del Estado reviertan en el sistema educativo del que no se espera sacar beneficios económicos sino sociales.

ESTE aquí es ficticio, lo sabemos. Pero en la medida que no imaginemos un hacer distinto, nos convenceremos que el sistema que tenemos es el único posible.

Mi hermana, Ziara Elhombre, es profesora interina de la enseñanza pública. El otro día trabajaba con sus alumnos los artículos de opinión. Este es el texto que escribió una de sus alumnas de 11 años: "La educación está por los suelos, porque Rajoy no nos deja estudiar tranquilos porque entre que va a recortar y que tenemos que ir a las manifestaciones no tenemos tiempo para estudiar. Nadie sabemos por qué Rajoy nos quiere fastidiar a todos con tanto recorte, al final todos nos iremos a otro país, lo malo esque esta crisis ya ha llegado hasta los rincones mas inesperados. Al final quemaremos la tierra y nos haremos peces, porque tendremos que vivir en el fondo del océano, el único sitio que no tiene presidentes ni reyes que matan elefantes."

O inventamos el mundo que queremos que sea y tejemos un aquí que nos cobije o tendremos que quemar la tierra y convertirnos en peces.

Activista cultural