La regeneración democrática, un debate sobre el que el PP quiere llevar la voz cantante en Aragón al haber propuesto la creación de una comisión al efecto, no ha encontrado respuesta en el resto de grupos, conscientes del uso político que pretenden los populares. La responsable del PP en la comunidad cobra como presidenta del Gobierno y como presidenta del partido. Nada ilegal, pero se niega a prescindir del segundo sueldo como exigen en el PSOE para iniciar el debate. Y el secretario general del PP, Octavio López, reclama hablar sin condiciones previas. Un bucle con aire electoralista.