Como ya estamos saliendo de la crisis, como ahora ya se puede, como esto es jauja, comienzan a suministrarnos las pequeñas dosis de caramelitos preelectorales con los que endulzar fechas tan entrañables. Todos hacen o harán sus aportaciones al mira que bien te lo pinto, pero el Gobierno que aspira a repetir entra directamente con la bajada de impuestos, un par de puntitos en el IRPF si es que trabajas. Para todos iguales, que no se diga, ganes 12.000 euros al año o 300.000. El que hace cuatro años no cumplió con su programa porque prefirió hacerlo con su deber repite cebo. Tanto deambular por los espacios de variedades de teles y radios estaba dando la impresión de que la dirección política no atendía los asuntos serios del país, enfrascados en aparentar que son sensibles a los pellizcos. Así que empiezan ya los renglones programáticos en los actos partidarios. Rajoy llama a todos para que le arropen frente al nuevo terrorismo, pero para el debate elige contrincante. Puestos a elegir, para la campaña se podría hacer con un ejemplar del informe de Hacienda que certifica que el sueldo medio anual en Aragón ha caído más de mil euros durante la crisis y eso para unas cuantías que rozan los 19.000. Si se atribuye la recuperación y considera a su partido único garante de la misma, también debería asumir la factura que el último cuatrienio ha tenido sobre los asalariados. En el 2008 empezó la tormenta, pero la bajada del salario medio se aceleró a partir del 2011. Es un tema para el debate. Si no hay Champions. Periodista