Estamos ya en la semana del patrón de Aragón a la que el Gobierno de Luisa Fernanda Rudi llega desfondado por los últimos acontecimientos económicos y sin tener claro cómo solventar sus problemas de déficit que tanto le fiscalizan desde Madrid. Sería bueno que el Ejecutivo despejara ya las dudas de hacia dónde van a ir los recortes para cumplir con las líneas que marca el ministro Montoro. Ya que la presidente tiene discurso el Día de Aragón, sería la mejor ocasión para clarificar su inmediato futuro. Se adivina otra mala parálisis.