El alcalde de Zaragoza, Pedro Santisteve, ha planteado los números del año próximo con vistas a aprobar los presupuestos municipales en tiempo y forma, algo que en las instituciones aragonesas ha dejado de ser una buena costumbre, pero a la que habría que volver, a fin de que ciudadanos y proveedores sepan a qué atenerse con sus impuestos y cobros.

Antes que nada, el regidor ha informado a los suyos, reunidos en asamblea, adelantándoles que las noticias económicas son mejores que malas. Que el Ayuntamiento paga sus deudas mejor que cuando gobernaba el PP; que ejecuta sus proyectos sociales mejor que cuando gobernaba el PSOE; y que dispone de más y mejores proyectos que cualquiera de los partidos hoy en la oposición. Entre sus reformas urbanísticas, destacan las ampliaciones de las avenidas de Cataluña y Tenor Fleta, más la intervención en los depósitos del Pignatelli.

Santisteve toma la iniciativa del debate presupuestario algunas semanas después de que anunciase su intención de concurrir nuevamente a las próximas elecciones municipales. Nadie en su entorno, en sus círculos, en Zaragoza en Común o en Podemos le ha contradicho, siendo de suponer que habrá informado, negociado o pactado su candidatura a puerta cerrada, y que la opción habrá sido bien vista en principio, aunque ninguno de sus colaboradores la haya suscrito en público. ¿Habrá primarias en ZEC? Debería. ¿Podría surgirle un competidor? Tal vez, ¿por qué no? Pero el hecho es que, hoy por hoy, Santisteve es alcalde y candidato. Por tanto, el principal adversario a batir por la oposición.

Encabezándola, Jorge Azcón, del PP, espera con impaciente paciencia (desde que Javier Lambán acuñó la inestable estabilidad de su gobierno, toda metáfora política es oxímoron). El PP nunca ha conseguido mayoría absoluta en el Ayuntamiento de Zaragoza y no parece que vaya a obtenerla en los próximos comicios. De ahí, que necesitará a su aliado natural, Ciudadanos. Un partido que, de momento, en Zaragoza capital no ha destacado por nada en particular, ni por sus cargos ni por sus ideas, siendo acaso su silencioso voto el aliado óptimo para un Azcón que todavía no ha presentado proyecto ni equipo.

CHA y socialistas deberán forjar y anunciar candidato, toda vez que en el PSOE Carlos Pérez Anadón parece amortizado. En el PSOE suenan hasta tres mujeres, y cuando el río suena...