El presidente del Real Zaragoza, Christian Lapetra, aseguró ayer que no tiene claro que el club deba costear la reparación que el Ayuntamiento de Zaragoza decidió ejecutar subsidiariamente en el estadio municipal de La Romareda. Esta escurridiza respuesta se produjo apenas unas horas después de que el concejal de Urbanismo, Pablo Muñoz, asegurara que se arreglarían los anclajes de las luminarias y la cubierta de la zona de tribuna, con un coste estimado de 250.000 euros. Tratándose de obras necesarias por seguridad, no hay que andarse con rodeos: lo más importante es que se hagan. Ni la propiedad puede descansar toda la responsabilidad en el concesionario, ni este puede mirar para otro lado invocando un acuerdo para la reforma integral del campo que los gobernantes de ZeC ya han dejado claro que no es de su agrado.