Ciudadanos, prepárense para lo peor. Sánchez advierte: "España está destrozada". Iglesias va más allá: "Nos han convertido en una colonia dependiente de Alemania". La invasión de los ultracuerpos es irremediable. Ya lo dejó clarito nuestro visionario Biel. Los primeros humanos en experimentar la transformación alienígena fueron sus alcaldes críticos de Zaragoza, que discrepaban con el comandante en jefe del PAR. Pues, ya lo ven, como en aquella vieja peli de ficción de los 70, las vainas extraterrestres se han reproducido rápido y pueblan a sus anchas por la península. "Saquean el país", asegura Garzón, se lo "regalan a sus amiguetes" privatizando AENA y Endesa y pidiendo el rescate bancario para "salvar al soldado Rato", puntualizó Sánchez. Y todo, sin salir de la vaina gigante de la Moncloa. También "mienten", como aseguró Díez, y demuestran "ser un gobierno inútil", como reseñaba el líder espiritual de Podemos. Son tiempos difíciles, conciudadanos. Los alienígenas de un signo u otro invaden la esfera pública e intentan ocupar nuestras mentes con sus no tan diferentes y en la mayoría de los casos débiles argumentarios. Ojo, estén atentos y no dejen que acaben con su verdadera patria. Esa, que "no es un símbolo" ni tampoco "una bandera ni un edificio", como asevera el gurú de la luz o de las sombras del momento, según quién lo juzgue; sino nuestra consciencia, que es la única a la que debemos salvaguardar de los intrusos. No dejen que invasor alguno controle su voluntad.

* Periodista y profesora de universidad