Humberto Vadillo, controvertido director general de Cultura compareció ayer en las Cortes para explicar las líneas básicas de su área.

Rechazo al dirigismo político y apuesta por la creatividad libre. No serían malos comienzos si se confirmaran en el día a día, una posibilidad que habrá que esperar a comprobar conociendo sus declaraciones culturales antes de ser nombrado para el cargo. Una excesiva visión de la cultura en términos economicistas no garantiza la creatividad, más bien la orienta al populismo, rentable pero peldaño hacia la vulgarización.