Al Real Zaragoza le ha debido organizar la pretemporada su peor enemigo, pues aún no ha terminado la aventura de Shanghai que comienza la de Grecia con todo tipo de incertidumbres. En teoría, los jugadores llegarán hoy a Zaragoza después de su viaje a China con escala en Londres, y en la práctica tendrán que tocar chufa y volar de nuevo, pues el jueves a las nueve de la noche juegan su primer partido en Atenas aunque anoche ni el club ni la agencia de viajes conocían el plan de vuelo.