Que Zaragoza logró el pasado ejercicio un récord de turistas, superando el del año de la Expo, ya es un indicativo de que los atractivos de la ciudad están calando en el interés de los visitantes, con un amplio crecimiento de los extranjeros. La suma de una oferta patrimonial potente, acompañada de propuestas culturales ya reconocidas en los ránkings europeos y hasta lúdicas, configuran una oferta que debe mimarse para elevar su atracción.