No es la primera vez, en el culmen de su incompetencia, que Zaragoza en Común (ZeC) recurre a la bravuconada o al ardid para imponerse desde su escuálida minoría municipal. Acaba de hacerlo de un modo más ignominioso: amenazando a los representantes de la oposición en los patronatos municipales. Los ediles de ZeC les han escrito una carta (varias en realidad, con ligerísimos cambios para descubrir a quien la filtrara) en la que advierten que habrán de responder con su patrimonio si el actual colapso en la gestión de estos patronatos (ZeC se ha quedado en minoría) perjudica a contratas o proveedores. ¿En qué capítulo del manual de nueva política aparece la intimidación como forma de actuación?