La Agencia Tributaria ha pedido a la magistrada del Juzgado Mercantil número 2 de Zaragoza que investigue qué han hecho los responsables del Real Zaragoza SAD con el dinero que pagó el Athlétic de Bilbao por el traspaso del centrocampista Ander Herrera, acordado a mediados de la pasada campaña por un montante de 8,5 millones de euros más otros 2,7 supeditados a que el futbolista logre o no diferentes objetivos en su nuevo equipo.

Hacienda ha detectado que al menos uno de los cheques que emitió el Athletic de Bilbao, por una cuantía de varios cientos de miles de euros, fue a parar a manos de una empresa controlada por Iglesias --ADL, del Grupo Codesport-- que hace unos meses vendió una finca en La Almunia a Zaragoza Real Estate, 100% propiedad del Real Zaragoza SAD.

Es decir, que una filial de Codesport ingresó cientos de miles de euros de un pago destinado al Real Zaragoza por traspasar una finca a una filial de la compañía deportiva. Las tres entidades tienen el mismo dueño.

El fisco quiere esclarecer la operación y el uso de ese efecto bancario para determinar si su endose a la empresa del Grupo Codesport pudo suponer algún quebranto para el Real Zaragoza o su grupo empresarial. Sobre la parcela --según algunas fuentes-- tiene una opción de retracto el Ayuntamiento de La Almunia.

Hacienda está personada en los concursos de acreedores de las dos principales empresas del grupo Real Zaragoza: la SAD que preside Agapito Iglesias y la inmobiliaria Zaragoza Real Estate. Así, la Agencia Tributaria quiere determinar si una operación como la reseñada puede haber supuesto algún perjuicio para los acreedores de esas sociedades.

DOS PROCEDIMIENTOS En caso del Real Zaragoza SAD, la Hacienda estatal es en realidad el principal acreedor, ya que tiene pendientes de cobro alrededor de 33 millones de euros. Sin embargo, Iglesias logró cerrar con ella un convenio unas semanas antes de presentar, a primeros de junio, la demanda de concurso para la compañía deportiva.

El soriano consiguió así, tras garantizar la deuda con su propio patrimonio, aplazar para los próximos ocho años el pago de los débitos con el fisco. Y, paralelamente, evitó que Hacienda, que tiene prioridad para cobrar sobre otros acreedores, estuviera presente de forma activa en el proceso concursal.

La Agencia Tributaria es también el principal acreedor de Zaragoza Real Estate, que presentó la pasada primavera una demanda de concurso de acreedores que la magistrada declaró el 19 de julio. En este concurso, en el que actúan como administradores los mismos profesionales que en el de su sociedad matriz, tampoco cuenta con un convenio de acreedores que permita atisbar la viabilidad del deudor.

Algunas entidades a las que la inmobiliaria blanquilla debe grandes cantidades, como la Hacienda autonómica, han logrado comenzar a cobrar ya al menos parte de su deuda. En este caso lo han hecho mediante el embargo de derechos de traspaso, como los que el Real Zaragoza SAD --propietario de la otra sociedad-- tiene pendientes de cobro por la llegada de Sergio García al Espanyol.

LA EMPRESA ADL, la sociedad que compró la parcela de La Almunia utilizando un cheque librado por el Athletic para pagar el traspaso de Ander Herrera --según la Agencia Tributaria--, es una de las empresas del Grupo Codesport, propiedad del constructor soriano.

En ella aparece Javier Bazaco, uno de los ejecutivos de confianza de Agapito Iglesias. Ha participado en algunos de los contactos que el soriano ha mantenido con grupos empresariales extranjeros interesados en hacerse con el Real Zaragoza. También figura en empresas de otros sectores, como algunas dedicadas a la representación de jugadores.