Se ha pasado el zaragocismo la semana pensando y discutiendo si el peligro de descenso es tan grave como a veces denuncia su fútbol. Se ha optado, casi en general, por situar la frontera en el encuentro de esta tarde, sobre todo en el caso de repetir derrota. Abrió el debate José Enrique en Córdoba asumiendo que la realidad es pelear por la permanencia. Continuó la semana con diversidad de opiniones, a gustos en función del futbolista. Dio su resumen el técnico ayer: «Siempre he dicho que el famoso tópico de partido a partido es lo más importante. Hace dos o tres semanas ya dije que estábamos más cerca de abajo que de arriba, y que lo que debemos hacer es ganar para alejarnos de abajo. Si te alejas de abajo, te acercas arriba».

Agné da por sentado que la temporada es una desgracia para el Zaragoza. «Yo no me distraigo de la realidad. Cuando un año sale malo, es malo para todo. A día de hoy necesitamos ganar, coger la autoestima que necesitamos y escalar posiciones. A perro flaco todo son pulgas. Hay años que van como van y hay que aceptarlo así. Pero tenemos un partido muy importante y estoy seguro de que haremos un equipo para sacarlo adelante».

El técnico no adelantó la alineación que se medirá al Sevilla Atlético, aunque sí dio por hecha la presencia de Ángel y Zapater, dos de los futbolistas que más han jugado esta temporada, que han arrastrado molestias durante toda la semana. «Ángel está bien, ha sido más por precaución. Zapater sí que ha sido más complicado por sus problemas en la espalda. Ha entrenado hoy -por ayer-, quiere estar, quiere sumar, quiere ayudar. Sabe que para eso hay estar al 100%, ya es suficientemente mayor. Él me ha dicho que está bien».

El Zaragoza deberá recuperar su mejor versión para no tener problemas en su estadio, donde hoy en día parece más sencillo que sume los puntos que necesita. «Son tres puntos muy importantes. Confiamos en que vamos a sacar el partido. Enfrente tenemos un equipo de chicos muy jóvenes, a muchos de ellos los veremos en Primera División. Son buenos, pero en nuestro campo nos tenemos que hacer fuertes y sacar los tres puntos».

Según Agné, el Zaragoza se va a encontrar un rival «atrevido, con jugadores buenos, veloces y con buen pie», al que habrá que alejar de su juego más cómodo. «Intentaremos quitarle la pelota y que no hagan su partido. Todos sabemos que los filiales son capaces de lo mejor y de lo peor. Si les dejas jugar como les gusta, te pueden complicar la vida».

Para empezar, tendrá que superar el varapalo del pasado sábado en El Arcángel, de donde se marchó con las peores sensaciones. «Para mí es la derrota más dura desde que estoy aquí, la que más me costó digerir. Estábamos cerca de ganar y no supimos hacerlo. Perdimos en el último minuto y de la manera más cruel. Vamos un trompazo tras otro, pero no hay otra que recuperarse y ganar al Sevilla Atlético. Se trata de luchar y no parar».

Hace dos semanas, la grada pitó a Agné durante la relación de las alineaciones por megafonía y lo abucheó cuando introdujo el cambio de Valentín. El entrenador no duda de cuál será el comportamiento de la afición. «Espero La Romareda como siempre. Creo que bastante bien se porta. Todos sabemos lo exigente que es nuestra gente, pero entienden lo que hay. Si hacemos un buen partido, nos aplaudirá; si no estamos bien, nos criticará».