Bono llega hoy a Zaragoza y en principio Víctor Muñoz le espera para entrenarse ya con el primer equipo, tras estar concentrado con Marruecos para los amistosos, ambos con victoria, ante Benin (6-1) y Zimbabwe (2-1), en este último además siendo titular en la portería de la selección marroquí. El portero cedido por el Atlético de Madrid habló tras este partido con su selección el pasado domingo y, cuando el periodista le preguntó por su situación en el Zaragoza, eludió por completo dar una respuesta, dejando claro que no quería comentar nada al respecto.

Lo cierto es que Bono es el único jugador de la plantilla que no ha disputado ni un minuto en competición oficial, ya que Alcolea jugó en la Copa del Rey, y llegó cedido por el Atlético para que tuviera minutos, para que ganara peso y rodaje en Segunda División. Su llegada tardía, sus convocatorias con Marruecos en octubre y noviembre, una lesión, la apuesta de Víctor por Whalley, de rendimiento impecable en el arranque de temporada... La situación de Bono ha tenido unas explicaciones, aumentadas por el horizonte de la Copa de África, que hacía más difícil el cambio de guardia en la meta si el portero marroquí se iba en enero casi dos meses. Sin embargo, Marruecos se ha negado a organizarla, papel que ha recaído en Guinea Ecuatorial, y ha sido expulsado del torneo.

LOS ELOGIOS

Eso cambia mucho el escenario y Bono también goza de la confianza de Víctor, que en privado y en público ha elogiado sus cualidades y que sabe que en el club hay una tendencia mayor para que juegue el arquero marroquí, sobre todo por si hay que acudir más veces al Atlético para pedir otras cesiones. El caso es que la apuesta de Víctor por Whalley ha sido muy firme, reforzada hasta hace un mes por las buenas actuaciones del portero, que estaba siendo de lo mejor del Zaragoza en esta temporada, con regularidad, aplomo, tranquilidad e intervenciones decisivas.

Sin embargo, ese gran nivel ha ido bajando en los últimos partidos, que han descubierto a un Whalley, de recién estrenada titularidad sub-21, menos sobrio. Y ha recibido muchos goles, hasta trece en los últimos seis partidos. Aunque no sea ni de lejos el mayor culpable de esa sangría, encajar mucho siempre supone una sombra para el portero.

Whalley no estuvo acertado en el segundo gol del Lugo, de David López, ni en el de Koné frente al Racing, contra el Tenerife sale tarde ante Ifrán en la primera diana y un mal despeje suyo provoca el de Rennella a pase de Xavi Torres. "Whalley tiene que echar la pelota fuera y no al medio. Le servirá para otra ocasión", dijo Víctor tras el partido, remarcando el fallo del portero, algo que tampoco le ayuda.

Es verdad que entre esos últimos partidos, el meta zaragozano tuvo una buena actuación en Alcorcón y una magnífica en Gijón. En El Molinón recibió tres dianas, pero salvó otras tantas. Pero el portero ya ha perdido la regularidad que exhibía en el inicio de Liga, donde no se le recuerda un error. Ahora está alternado actuaciones convincentes con fallos claves, como el del primer gol ante el Betis. Además, es casi una norma no escrita que todo debutante experimente un bajón después de los primeros partidos. Y eso también le está pasando.

Ahora, la papeleta es para Víctor. Y queda claro que la evasiva respuesta de Bono a los medios de Marruecos refleja que el portero, como sus representantes y el propio Atlético, no están para nada contentos con su situación en el Zaragoza y que si ésta no varía enero puede traer un cambio de destino.