El gol de Nino tras perfecta asistencia de Roberto Torres en el minuto 29 del partido en La Romareda ante Osasuna fue el último que recibió Bono, ausente por cierto el próximo domingo en Albacete, donde Manu Herrera regresará a la portería. Han pasado 241 minutos desde entonces, los duelos en Lugo (0-0) y ante el Alavés (1-0), y el Zaragoza ha logrado cerrar su portería.

Es un paso vital para subir y más cuando el equipo diseñado por Ángel Martín González y dirigido por Popovic no anda sobrado de gol, de hecho tiene menos que el curso pasado. No es todavía un registro para sacar pecho, pero es evidente que el Zaragoza, más sobrio y ordenado con el cambio de sistema que comenzó en el Anxo Carro, está empezando a ser también un equipo difícil de batir, una idea básica esta temporada.

Cuarto menos goleado

Ahora mismo, solo el líder Osasuna (3), la Ponferradina (4) y el Alcorcón (5) han encajado menos que el Zaragoza, que lleva seis dianas en contra, las mismas que Córdoba y Gimnástic. Menciona bastantes veces Martín González el ejemplo del Sporting, que subió el año pasado con solo 27 goles encajados, o los de hace dos cursos del Eibar (28) y del Deportivo (36). Fueron ascensos cimentados en la rocosidad, en hacer bien las cosas como bloque y que no necesitaron de excesiva puntería en ataque. Solo la justa.

Y dejar la portería a cero en muchos partidos es el único termómetro válido en esa teoría para regresar a la élite. El Zaragoza, que hasta acudir a Lugo no lo había logrado en las cinco primeras jornadas --un dudoso honor que solo Almería y Mirandés compartían entonces-- , ha echado el candado y suma en la tabla. Un punto en el Anxo Carro y los tres frente al Alavés. Cuatro de seis, una pequeña racha ya.

El precedente

Hay que viajar a la jornada 30 de la temporada pasada para ver el último ejemplo del Zaragoza de acumular dos partidos seguidos sin encajar. No lo hizo el equipo frente al Lugo en La Romareda (0-0) y con el Racing en El Sardinero (0-2). Claro que ni esa ni la actual es la mejor racha del Zaragoza de Popovic con la portería imbatida. Y es que Bono estuvo a un paso de igualar en febrero pasado los registros de Manolo Villanova (71-72 y 72-73) y César Láinez (02-03) al coleccionar cinco citas seguidas y 476 minutos sin recibir un tanto. Fueron las victorias frente a Leganés (2-0), Recreativo (2-0), Barcelona B (4-0) y Osasuna (0-1) y el empate en Sabadell (0-0). Eso sí, el despertar del portero marroquí no pudo ser más abrupto, con un 4-0 en Vitoria ante el Deportivo Alavés en un choque donde se retiró lesionado al final.