Para el director deportivo del Real Zaragoza era prioritario reforzar el centro de la defensa y la primera apuesta de Narciso Juliá para acompañar a Cabrera en esa posición es Marcelo Silva. El jugador será presentado hoy en La Romareda, a las 12.30 para los medios, a las 13.00 en el césped, y se unirá en las próximas horas a la concentración del equipo aragonés en Boltaña para ponerse a las órdenes de Luis Milla y empezar a conocer de primera mano qué le va a exigir el técnico. Silva tiene experiencia en la categoría tras pasar por el Almería, Las Palmas y Valladolid. Uno de sus entrenadores en Almería, en el 2012, fue Esteban Vigo, que consiera que el uruguayo "le va a dar una buena rentabilidad al Zaragoza".

Vigo considera que el rendimiento de un futbolista depende de varios factores, como de lo que pueda pedirle el entrenador o de la trayectoria del equipo. "Imagino que lo que busca Luis Milla es no solo contundencia sino también tener salida de balón, porque es un entrenador al que le gusta jugar al fútbol", explica Vigo, que considera que Marcelo Silva puede adaptarse a ese papel. "Creo que tiene salida de balón, la cuestión es que pueda hacerlo", señala.

El exentrenador de Almería, Xerez o Hércules, entre otros, no duda de que Marcelo Silva "puede aportar buenas cosas al Real Zaragoza porque reúne unas condiciones que le van a venir bien al equipo", aunque tampoco olvida que al jugador "se le va a exigir" en el equipo aragonés. "Ha ido a un equipo importante, con aspiraciones, porque lo normal es que el Zaragoza sea de los que están arriba". Según Vigo Marcelo Silva tiene contundencia atrás y también destaca en el juego aéreo. Además es un jugador "con carácter" que puede ayudar también en el vestuario. Por todos esos motivos Vigo concluye que "le va a venir muy bien al Zaragoza".

Desde luego, Silva conoce la Segunda División y tiene experiencia en ascensos. Después de debutar en el Danubio uruguayo el Almería se hizo con sus servicios cuando tenía únicamente 21 años para jugar en Primera División. En el club andaluz vivió un descenso y un ascenso en sus dos primeras campañas y luego estuvo otras dos, con un intervalo de cuatro meses cedido en el Peñarol de su país. Tras acabar contrato en el Almería se marchó a Las Palmas, donde también consiguió dar el salto a la máxima categoría en el playoff frente al Real Zaragoza, en el que disputó los últimos dos minutos del partido de vuelta. Sin embargo, el equipo canario no contó con él en Primera y la temporada pasada jugó en Valladolid. Allí disputó 38 encuentros de Liga en los que vio 8 amarillas, fue expulsado una vez y marcó un gol.