Getafe, Real Zaragoza y el portero Alberto están buscando la fórmula para que el meta barcelonés salga del club azulón, donde se desea esa salida, y pueda llegar al Zaragoza, el destino que seduce al arquero, que tiene dos años más de contrato en un equipo recién ascendido y con unas condiciones salariales que pretende hacer valer. Así, el escenario que ya se ha dibujado entre las partes es una cesión del portero, que podría incluir una opción de compra obligatoria en caso de ascenso a Primera con el Zaragoza. El marco ya lo conocen los agentes de Alberto y por ahí puede estar la salida al laberinto para que llegue al club aragonés el portero que desean Lalo Arantegui y Natxo González.

En esa cesión, el Getafe tendría que asumir una parte del salario del guardameta, muy inferior en todo caso a la cifra del escenario de la desvinculación de la entidad azulona dibujado en un primer momento. El meta, que fichó en el verano pasado procedente del Sporting por dos temporadas, hasta el 2018, se ganó una tercera tras disputar un gran número de partidos, hasta 34 de Liga, si bien los del playoff los jugó Guaita, con el que cuenta Pepe Bordalás, mientras que el Getafe quiere la cesión del arquero del Everton Joel Robles.

«En la portería tenemos dos porteros. La decisión es firmar otro portero y quedarnos con tres», dijo Ángel Torres, presidente del Getafe, en una declaración que buscaba un posicionamiento para forzar a Alberto a que rebaje sus pretensiones económicas para marcharse. Pero ni el Getafe quiere tener tres porteros con Alberto en la grada ni el meta barcelonés desea quedarse toda la temporada sin jugar.

Así, para hoy o a lo sumo mañana, está previsto que el Getafe, a través del propio Torres y del director deportivo, Ramón Planes, traten junto a los agentes del arquero de buscar una solución, teniendo en cuenta que el conjunto madrileño regresa a la actividad el 18 de julio y la intención del club y del portero es no tener que presentarse ese día al inicio de la pretemporada, aunque también Alberto tiene claro que su decisión de hacer valer su contrato es firme.

¿Y el Zaragoza? Lalo también jugó al despiste el pasado viernes. «La portería es la posición que más nos va a costar. Estamos barajando varias alternativas, no hay un nombre solo. Nos podemos marcar una fecha prudencial, pero espero que en dos o tres semanas esté resuelto», dijo. Ese plazo es el que se da el club para encontrar una solución para traer a Alberto, primera e indiscutible opción por el momento para la portería.

Si no se logra en dos semanas, el Zaragoza intentaría traer a otro portero. En todo caso, el diálogo del director deportivo con el entorno de Alberto es continuo y al meta le seduce por completo la opción de jugar en La Romareda. Hasta ahora, esa alternativa era con un contrato que apuntaba a ser por dos temporadas, pero ahora se abre la vía de una cesión por una campaña.