Narcís Juliá, director deportivo del Real Zaragoza, analizó ayer con cierto optimismo la forma en la que se va componiendo la plantilla. "Estoy contento. En estos momentos creo que llevamos nueve incorporaciones, más la de Álvaro Ratón, diez. Son muchos cambios, mucho trabajo, pero, en definitiva, estamos haciendo un poco lo queríamos y lo que podíamos en función de nuestras limitaciones", dijo Juliá, consciente de que faltan por ajustar las piezas y rematar la confección. "Tenemos hecho el armazón principal del equipo y hay que tomarse un pequeño momento de calma para ver hacia dónde queremos ir. Evidentemente, nos falta como mínimo un jugador de banda, porque en estos momentos solo tenemos a Xumetra y Cani. Luego analizaremos el mercado en función de si consideramos que hay alguna posición más para incorporar".

El siguiente paso será ensamblar a los futbolistas. "Estos jugadores que han llegado, aunque tienen calidad e ilusión, deben cohesionarse y entender la filosofía de un nuevo entrenador, así como hacer un equipo y por eso habrá que tener un poco de paciencia. Con eso no me quiero cubrir yo ni al entrenador, pero es la realidad. Cuando se hacen tantos cambios, requieren luego un esfuerzo para que las cosas encajen bien. De todos modos, yo creo que hay un buen equipo, que vamos a hacer una buena temporada y a pelear por ascender, pero no debemos dejarnos llevar por la ansiedad. Ahora estamos medio agachados, pero este club se va a poner de pie".

La idea es fichar un delantero distinto a Ángel y Dongou para terminar de reforzar el ataque. "En eso estamos y es lo que está reclamando todo el mundo, pero no hay mirlos blancos. Dependerá de la capacidad económica que tengamos y de la oportunidad que ofrezca el mercado de traer un jugador que pueda marcar diferencias. Si traemos un tercer delantero debe ser diferente a los dos que tenemos".

El director deportivo del Zaragoza dejó entrever que solo vendrá otro central si al final se marcha traspasado Leandro Cabrera. Para el eje de la zaga se han incorporado ya Marcelo Silva y Popa. "Estaba en marcha buscar otro central y tenemos que estar muy alerta en ese tema porque lo de Cabrera no depende tanto de nosotros sino también de una opción que él tiene a nivel contractual (su cláusula asciende a dos millones de euros y la mitad de esa cantidad sería para el jugador si es traspasado) y de que haya alguien en el mercado dispuesto a pagarla. Por eso tenemos que estar atentos al mercado por si hay que actuar".

EL CASO DIAMANKA

Luis Milla también comentó que tras la salida de Diamanka sería bueno que llegara otro jugador para el centro del campo. "Lo estamos estudiando. La verdad es que estas últimas salidas tienen que ver un poco con el objetivo de equilibrar el equipo. Yo sé que el míster estaba muy contento con su rendimiento, porque había venido muy bien a la pretemporada y era un jugador que le estaba gustando, pero a nivel presupuestario necesitábamos también equilibrar el equipo en zonas donde no vamos tan bien nutridos".

Juliá también se refirió a Manu Lanzarote. "La puerta cerrada nunca está, pero eso no solo depende de nosotros. A Lanzarote le hicimos una propuesta de renovación y las posturas no estaban lo suficientemente cercanas para lograr un acuerdo. Ahora no puedo contar nada nuevo. No me consta que haya fichado por ningún equipo, pero no sé si la puerta del Zaragoza la mantendrá abierta o en algún momento puede reestudiar nuestra oferta. Deportivamente hubiera sido un jugador que nos habría venido muy bien, pero la realidad es la que es", concluyó.