Pape Diamanka se ha convertido en un jugador imprescindible para Ranko Popovic. El senegalés reaparecía ayer y mientras estuvo en el campo fue uno de los más destacados del Real Zaragoza. En el minuto 47 tuvo que pedir el cambio por un pinchazo. Hasta entonces había participado en casi todas las jugadas de peligro. El disparo previo a marcar el primer gol Pedro fue suyo y también la jugada del segundo tanto de Ortuño. Antes de marcar Pedro tuvo también una buena ocasión para batir la meta visitante y mucho antes estuvo a punto de marcar de cabeza.

Tras una pretemporada irregular y con dudas sobre su juego, Popovic no decidió dar entrada a Pape Diamanka en el once hasta el partido en campo del Lugo y a partir de entonces se convirtió en un titular fijo dentro de ese esquema 4-1-4-1. Diamanka es el jugador que aporta algo diferente dentro de ese triángulo que forma con Dorca por la izquierda y Erik Morán por detrás de ellos. No ha demostrado tener mucho gol, pero llega arriba con facilidad y se asocia bien con sus compañeros. Popovic iba a cambiar ayer de sistema, pero al poder contar con el senegalés prefirió no tocar nada.

Y otro dato, Diamanka ha sido hasta ahora talismán. El Real Zaragoza no ha perdido cuando ha estado el senegalés en el campo. Ha jugado ocho encuentros de Liga, con cinco victorias y un empate. Pero ahora podría estar un mes fuera por lesión.