Luis Cid Carriega, entrenador del Real Zaragoza desde la temporada 1972-1973 a la 1975-1976, ha fallecido hoy a la edad de 88 años. Nacido en Allariz, en la provincia de Ourense, el 9 de diciembre de 1929, el técnico gallego condujo a uno de los equipos más legendarios del club aragonés, el de los Zaraguayos, subcampeones de Liga (la mejor clasificación en la historia) en la campaña 74-75, después de quedar terceros en la anterior. En su último curso en La Romareda disputó al final de la Copa contra el Atlético, torneo que ganaron los colchoneros.

Su carrera en los banquillos empezó en Cartagena, para después pasar por Europa, Langreo, Sporting, culminando su etapa como entrenador con el Real Zaragoza. Sus siguientes destinos fueron Sevilla, Betis, Atlético de Madrid, Elche, Celta y Figueres. Se despedía de su larga y rica trayectoria con el Ourense en 2ªB.

Carriega llegó al Real Zaragoza en 1972 de la mano de Zalba y Eduardo Gil y de otro ilustre gallego, el también orensano y secretario técnico Avelino Chaves. Con el equipo recién ascendido de Segunda, la primera campaña fue de transición. En el verano de 1973 se produjo una revolución con los fichajes de los paraguayos Diarte, Arrúa y Soto y del uruguayo Blanco. El sevillano José González, procedente del Betis, fue otra de las adquisiciones notables para formar un conjunto de fútbol brillante. Uno de los momentos cumbre de esta etapa se produjo el 30 de abril de 1975, cuando el Real Zaragoza se impuso al Real Madrid por 61 con tres goles García Castany, quien hizo tres, Diarte, Arrúa y Simarro.

Carriega recordaba en una entrevista que concedió a EL PERIÓDICO DE ARAGÓNel pasado 8 de enero algunos de los pasajes de aquel grupo tan singular que incluía en su cláusula la dolce vita zaragozana . "No, entrenaban bien, los llevaba bien y estaban bien preparaditos. Les hablaba mucho, les explicaba mucho, les daba charlas y funcionaba estupendamente. Luego es verdad que algunas noches iba a la discoteca Iguana a vigilarlos y de vez en cuando los pillaba pero acababa haciendo la vista gorda porque luego respondían con goles los domingos (ríe)". De Arrúa y Diarte recordaba que "cuando vinieron a Zaragoza les invitamos un día mi esposa y yo a comer a casa un cocido gallego y no vea cómo se lo comían todo, tenían un hambre los pobres… Eran tiempos difíciles y era una forma de que se aclimataran aquí también".

Fue el entrenador con más partidos dirigidos en el Real Zaragoza hasta que Víctor Fernández y Luis Costa le superaron en temporadas posteriores.

El Periódico de Aragón tuvo la oportunidad de charlar con el técnico el pasado 8 de enero. Aquí puede leerse la entrevista completa.