Javi Espinosa es uno de los centrocampistas con más visión e inteligencia de Segunda. A pesar de tener solamente 25 años afronta su octava temporada en el fútbol profesional. Tras despuntar en el Barcelona B, el Villarreal le fichó para jugar en Primera. No encontró el sitio y, desde entonces, ha jugado en el Almería, Elche y, la pasada campaña, ascendió con el Levante. Para este curso tiene el mismo reto con el Granada y con un rol principal en el equipo nazarí, en el cual busca estabilidad y confianza.

—Otra vez cambia de equipo tras una temporada, ¿cómo afronta esta nueva etapa en Granada?

—Es una respuesta difícil porque al final no tienes la estabilidad que te da la confianza y tranquilidad para hacer tu fútbol pero he venido a un buen sitio, a un club con mucha afición y que quiere hacer las cosas bien para volver a Primera. Se trata de encontrar mi sitio allá donde me quieran.

—Igual que en la temporada pasada con el Levante, esta campaña defiende los colores de un recién descendido de Primera División. El objetivo está muy claro, ¿no?

—Cuando llegué al Granada muchas cosas me recordaron al año pasado. Hay un bloque con la mente puesta en el ascenso, pero no de cualquier manera. Tenemos que tener humildad, trabajo y pensar en el día a día.

—En el primer partido ante el Albacete en su estadio les costó y finalmente empataron, ¿qué les sucedió?

—En la primera jornada se demostró lo que es la categoría. Viene el Albacete y te pone las cosas difíciles. Es un rival que se encerró muy atrás, se posicionó muy bien en el campo y fue muy difícil hacer gol. Al final logramos un empate, sumas, pero creo que merecimos mucho más. No hay que ponerse nerviosos, al contrario. Sumar siempre es bueno.

—Los dos equipos han cambiado a casi todos sus jugadores y en Zaragoza los propios jugadores y el entrenador están hablando de que hay que tener paciencia, ¿tanto cuesta conjuntar un equipo con mucha gente nueva?

—Sí, cuesta. De nuestro equipo quedan solo uno o dos de la temporada pasada y no es fácil. Cada uno tiene unas características diferentes y hay que aprenderlas y conocerlas. Poco a poco en los entrenamientos y en los partidos se va conjuntando el equipo.

—¿Qué conjunto considera que tiene más necesidad de vencer el partido?

—En la segunda jornada los dos. El Zaragoza se estrena ante su afición y querrá ganar y nosotros queremos estrenar el casillero de victorias en la categoría. Son tres puntos que serán importantes para los dos a lo largo de la temporada.

—Pero el Granada tiene más necesidad o presión porque se les pide el ascenso ya.

—Presión tampoco es. Tenemos que mirar el día a día. El objetivo claro que es el ascenso pero también es una ilusión. Lo que viene ahora es el Zaragoza y solo tenemos que pensar en eso.

—¿Qué tipo de fútbol espera que se vea del Granada en La Romareda?

—Tenemos un míster con las ideas muy claras. Queremos ir a por la victoria y ser protagonistas de los partidos, pero luego cada partido es un mundo. Espero que la batuta la lleve el Granada.

—Para esta temporada, ¿dónde situaría al Real Zaragoza en la clasificación?

—Creo que el Zaragoza es un club histórico que lógicamente es de Primera División. Tiene que tener paciencia y encontrar el camino, nada más.

—¿Y qué le sucedió el curso pasado para luchar por no bajar?

—Que la categoría es muy igualada y cualquier equipo te pone las cosas complicadas como vemos cada jornada. Al final todos los equipos quieren subir y cada vez más hay equipos históricos que no se amoldan a la categoría y van a remolque.

—Usted que sabe lo que es ascender porque lo hizo la campaña pasada con el Levante, ¿cuáles son las claves?

—Amoldar el bloque, tener una calidad humana muy grande y tener la mentalidad de ir día a día y partido a partido. Parece un tópico pero no lo es, es la realidad.

—Si uno de los dos equipos pierde, ¿entendería que hubiera un ‘runrún’ por la falta de buenos resultados?

—Es entendible por parte de la gente porque quiere que su equipo gane y engancharse a él, pero al final dentro del vestuario no habrá runrún porque, con dos jornadas, quedarán todavía 40 y son muchísimas.