No habrá juicio por el Levante-Zaragoza que supuso la permanencia en Primera en la temporada 2010-2011 porque la magistrada del Juzgado de Instrucción número 8 de Valencia, Isabel Rodríguez, ha decretado el archivo provisional de la causa, al entender que no hay indicios suficientes para procesar a los 42 encausados, entre ellos el Real Zaragoza como entidad. La investigación que puso en marcha la Fiscalía Anticorrupción ha durado 28 meses y se tomó declaracion a todos los protagonistas de aquel partido sobre el que hubo sospechas de amaño para que el Zaragoza lograse el triunfo por 1-2.

La noticia de que la causa quede sobreseída de forma provisional fue acogida con «satisfacción» por el Zaragoza, «ya que entendemos que es buena para el club. Igual que colaboramos en todo momento en el proceso, manifestamos ahora el máximo respeto a la autoridad judicial y a su decisión», dijeron fuentes de la SAD.

La Fiscalía Anticorrupción, que solicitó en mayo a la jueza el procesamiento de los encausados, y la Liga de Fútbol, que denunció y cuyo presidente, Javier Tebas, declaró como testigo y vio indicios de sobra en ese presunto amaño, tienen cinco días hábiles para presentar un recurso ante la Audiencia Provincial, pero estos empiezan a contar desde el 1 de septiembre al ser inhabil agosto.

Entre los investigados se encontraban el Zaragoza como persona jurídica; Agapito Iglesias, por entonces dueño de la SAD; dos de sus directivos (Javier Porquera y Paco Checa); el entrenador Javier Aguirre; y Antonio Prieto, director deportivo. Y los exjugadores Lanzaro, Doblas, Da Silva, Jorge López, Ander Herrera, Braulio, Ponzio, Gabi, Diogo, Obradovic, Uche, Pinter, Paredes, Leo Franco, Jarosik, Bertolo, Boutahar y Lafita. Había también 18 jugadores del Levante investigados.

El partido se disputó el 21 de mayo y entre el 17 y el 19 de ese mes el Zaragoza, a través de Agapito Iglesias a Javier Porquera, director financiero, ordenó transferir 965.000 euros en dos pagos, el primero de 50.000 euros y el segundo de 40.000 en unos casos (6) y de 35.000 en otros (5) a nueve jugadores (Lanzaro, Ander, Doblas, Da Silva, Braulio, Ponzio, Gabi, Diogo y Jorge López) a Aguirre y a Prieto. El ingreso se justifica en los jugadores en «haber conseguido el objetivo deportivo de mantener la categoría en Primera División», reza el auto y «los administradores concursales (el club estaba en esos momentos en concurso de acreedores) lo dan como válido».

Se reconoce en el auto que esas 11 personas sacan dichas cantidades de esas cuentas, «según ellos, para devolverlas al club, pero lo cierto es que no lo han justificado de ninguna forma». «No ha quedado acreditado sin embargo, el destino dado a aquel dinero y menos aún que se entregara a los jugadores del Levante para dejarse ganar en el partido con el Zaragoza», continúa el auto.

SIN PRUEBAS SUFICIENTES

No considera la magistrada que el hecho de que las transferencias se realizaran antes del partido ni la reducción de gastos posteriores de los jugadores del Levante sean pruebas suficientes. Sobre lo segundo, asegura que «no puede bastar para mantener una acusación». «Ninguna de las personas que se supone informaron a Javier Tebas ha reconocido el contenido de dichas informaciones, e incluso algunos han negado que hablaran con el denunciante», dice el auto sobre la acusación de la Liga. Tampoco da validez a la declaración del presidente del Deportivo, Augusto César Lendoiro, porque «no aporta ningún dato objetivo». Además, agrega que «los árbitros no apreciaron ninguna conducta sospechosa o pasiva en los jugadores».